El cuerpo de Andrés no ha aguantado más

10259840_730122433704962_1922960553623290854_n

Él llegó al Santuario junto con 4 pollos más que fueron los protagonistas de un anuncio de pollos para consumo en la televisión catalana, y que los de la empresa publicitaria quisieron salvar y los trajeron al Santuario.

Es un broiler, los cuales han sido genéticamente seleccionados para que crezcan mucho en muy poco tiempo, tanto que con tan sólo 41 días de vida son enviados al matadero, con el tamaño que las empresas necesitan que tengan para que sean rentables.

La esperanza de vida de las gallinas suelen ser de unos 15 años, pero estos al ser tan seleccionados, no suelen vivir más de dos años, porque debido al crecimiento de sus órganos, tienen problemas respiratorios y en sus extremidades, debido al gran peso que tienen que soportar.

En febrero Andrés estuvo ingresado en una clínica veterinaria porque comenzó a tener problemas con el nervio ciático, que le impedía caminar con normalidad, y desde entonces, Irene, otra broiler no se apartaba de su lado y lo cuidaba, lo mimaba y le daba compañía. Ellos dos esperaban la llegada de una silla de ruedas que les ayudara a caminar, pero al final ninguno de ellos la ha podido estrenar.

Irene nos dejó hace dos semanas, y desde que eso ocurrió, Andrés comenzó a estar más decaído, y esta noche ha muerto por un paro cardíaco.

Andrés, hemos intentado darte una vida digna, llena de comodidades y en la que no has sido tratado como un objeto, sino como un individuo con intereses, como el de vivir, y vivir libremente.

Ayúdanos en esta lucha desde el arcoíris en el que estás ahora, junto con Irene, Yolanda y tantos otros que nos habéis dejado, y que habéis marcado nuestras vidas para siempre. No nos cansaremos nunca de luchar, y os prometemos que no pararemos hasta acabar con el especismo.

Descansa en Paz y que tu luz nos guíe.