Jordi es un cordero que llegó hace unos meses a Santuario Gaia desde Mallorca, porque fue encontrado llorando alrededor de su madre muerta. Llegó con una enfermedad que le hizo quedarse sin párpados y estaba ciego, pero después de mucho esfuerzo, conseguimos recuperar la visión de uno de sus ojos y parte del otro.Olga llegó