1 de noviembre Día Internacional del Veganismo

Hoy en Santuario Gaia no celebramos una moda, ni una filosofía ni un estilo de vida, celebramos un cambio de conciencia que será la que salve a todos los animales de la explotación a la que los sometemos los animales humanos.

Cada año, 53 MIL MILLONES de animales mueren para servir como alimento a los humanos, sin importarnos sus sentimientos ni que ellos también quieren vivir.

Las vacas tienen una esperanza de vida de unos 25 años, pero sin embargo a los 4 o 6 años ya son enviadas al matadero, al bajar su producción de leche. Pero antes de eso, durante esos años, son inseminadas artificialmente cada año, para dar a luz un hijo que le será arrebatado al instante de nacer para que así no se beba la leche que va a ser vendida a los humanos. Los nacidos machos serán enviados al matadero a las pocas semanas, y las hembras se unirán a la cadena de producción.

Las gallinas han sido seleccionadas genéticamente para que pongan un huevo cada día, cuando lo normal es que hagan unas tres puestas al año. Son encerradas en naves sin ver la luz del sol, ni la tierra o saber lo que es una planta. Cuando a los 2 años bajan su producción de huevos, son enviadas al matadero, cuando su esperanza de vida es de unos 15 años. Esto también ocurre en las granjas ecológicas.

Los pollos broilers han sido seleccionados genéticamente para que crezcan mucho en muy poco tiempo, tanto que con tan solo 1 mes y medio de vida ya son enviados al matadero, al haber alcanzado el peso idóneo para su venta.

Ovejas y cabras son explotadas por su leche, carne y lana. Cada año cuando dan a luz, los nacidos machos son enviados al matadero, y las hembras se unen a la cadena de explotación. En el momento en el que alguna de ellas tiene algún problema son enviadas al matadero, ya que lo único que importa es que produzcan, como si de una fábrica de leche, de hijos y de lana se tratara.

Los cerdos nacen en naves, donde muchos de ellos son aplastados por sus propias madres al estar encerradas en unas jaulas llamadas parideras, donde ni siquiera pueden darse la vuelta. Una vez alcanzado el peso deseado, son enviados al matadero, pero antes de eso sus rabos y dientes son mutilados.

Pavos, patos, conejos, palomas, peces y muchos animales más, son sometidos a torturas privados de libertad, para terminar siendo asesinados.

 

Otros muchos son utilizados en espectáculos para la diversión de los humanos, como la tauromaquia, los delfinarios, los circos, los zoos, la caza, etc. O utilizados como objetos para experimentar con ellos tanto para medicamentos, cosméticos y productos de limpieza. También para servir como vestimenta, convirtiéndose en abrigos, chaquetas, zapatos, etc.

La cantidad de vidas con las que acabamos cada año, supera las peores de las pesadillas que hemos pasado los humanos, ya que en la Segunda Guerra Mundial 6 millones de judíos fueron asesinados por los nazis. Entre 1525 y 1866, 12.5 millones de africanos fueron embarcados para servir como esclavos.

Todos los que comenzaron a luchar por la abolición de la esclavitud o por el fin del exterminio de los judíos, arriesgaron sus vidas y fueron tratados como delincuentes que incumplían las leyes establecidas en la época.

Somos pocos los que estamos luchando por la liberación animal, pero somos pioneros en la construcción de un nuevo mundo, un mundo en los que todos los seres seamos tratados como iguales, sin importar la especie a la que pertenezcamos.

Hoy es un día para comenzar una nueva vida, una vida diferente en la que luchar por los demás animales, por los que no son escuchados, por nuestros hermanos y compañeros de planeta.

 

¡ ROMPE LAS CADENAS Y ABRE LAS JAULAS, ES LA HORA DE LA LIBERACIÓN ANIMAL!