Hay una ovejita llamada Silvia que no se aparta de la puerta de la cabañita donde viven los fundadores del Santuario.Dicha ovejita se pasa la noche llamando a la puerta para entrar, y entre ella y el gamberro de Javi el cerdito, nos van a matar a «Los Fundas» que no los dejan dormir 🙂